15.7.11

ROMANCE DE CATALINA ZAMBRANO


Un martes era por cierto
cuando aquel hermoso sol
de Catalina Zambrano,
mujer de un Gobernador,
saliendo un día a pasearse
con damas de gran primor,
se enamoró de un mancebo
por su sonorosa voz.
Escríbele mil billetes
y prendas de gran valor,
y el mancebo se curaba
de tener con ella amor
por ser mujer de quien era
y prenda de tal señor.
Mas como el amor es niño
todo fuego y todo ardor,
buscaron por donde hablarse,
que amor busca ocasión;
gozáronse muchos años
sin recelo ni temor
y el Gobernador, celoso,
de todo fue sabedor.
Saliendo un día a pasearse
con hábitos de varón,
fuéle siguiendo los pasos,
con el mancebo encontró,
dióle nueve puñaladas
y a sus pies lo arrodilló.
Va en busca de la mujer
y allá dentro la alcanzó
y arrancando el espadín,
ambas piernas le cortó.
-Ay, don Francisco de mi alma,
por lo mucho que te quise
y nos quisimos los dos,
en este trance te pido
que me otorgues confesión!
El Gobernador, piadoso,
manda traer confesor.

Según Andrés Fidalgo, Ricardo Rojas al ordenar el Archivo Capitular de Jujuy localizó el siguiente romance escrito al dorso de un legajo de 1640.  Lo transcribe en su libro "Panorama de la Literatura Jujeña" y en grafía actualizada para su mejor conprensión. Para Fidalgo es de gran valor por tratarse del primer romance jujeño, dentro de la producción anónima.

 

14.6.11

Pintando mi perfil

Lindo lindo el resultado, marrón, sobre todo marrón, recomendable.
http://freshperspectives.msn.com/paintyourprofile/

creencia

Aquello en lo que se cree de tal manera que no se cree siquiera que se cree: se lo toma como natural, como obvio, como evidente.

Raimond Panikkar

13.6.11

Las seis reglas de oro de un escritor, según George Orwell



En su ensayo Politics and the English language, pregonó la precisión y la objetividad, no como un recurso demagógico al habla popular, sino como resultado de un estudio concienzudo y una lucha perpetua contra el lugar común. En ese trabajo, Orwell dictó lo que consideraba las seis reglas de oro de un buen escritor o periodista:

1. Jamás use una metáfora o cualquier otra figura de lenguaje que está acostumbrado a ver impresa;
2. Nunca emplee una palabra larga cuando una más breve expresaría la misma idea;
3. Si es posible cortar una palabra, córtela siempre;
4. Jamás use la voz pasiva cuando se pueda usar la voz activa;
5. Jamás emplee una expresión extranjera ni un vocablo técnico o científico, cuando pueda emplear una palabra cotidiana:
6. Infrinja cualquiera de estas reglas antes de decir un disparate.

    7.6.11

    absolutos

    (Foto: Robert Doisneau)

    Hay cosas que enfrasqué y guardé en la alacena de más arriba. Erróneamente pensé que con el paso del tiempo, cuando decidiera abrir el frasco ibaa estar igual, sin hongos, con sabor a buenos momentos, a felicidad eterna. Y no che. Justo ahi me acordé, la mierda, me olvide del conservante.
    .

    24.4.11

    Dijo Castoriadis

    "Hay que poder imaginar algo distinto a lo que está para poder querer; hay que querer algo distinto a lo que está para liberar la imaginación." Cornelius Castoriadis

    21.2.11

    Todavía faltan algunas cuadras...

    Él se lo dijo de la forma más sutil.
    Sin palabras.
    Era el fin, ella lo supo
    pero hizo como si no hubiera escuchado.
    Simplemente no quería.

    Después, llegó el invierno.

    ...